Probando el champú sólido de Lush. Mi opinión y experiencia con Seanik y Soak&Float
Hace unos días hicimos pedido a Lush y para llegar a los gastos de envío gratis metimos dos champús sólidos para ver qué tal la experiencia y tener nuestra propia opinión. Había oído hablar de los champús en pastilla en mil sitios, hubo una época en la que todo el mundo tenía uno, pero no solo de Lush. Me quedé con ganas de tenerlo entonces pero no me atreví. En mi día a día intento reducir plásticos y ser más consciente con el Planeta, a tope con el zero waste y con Greta, pero mi pelo es delicadito (no es su culpa, lo he maltratado mucho yo) y soy fiel a los champús que sé que me van bien, los voy alternando para que no se acostumbre demasiado el pelo y meto poca innovación.
Esto cambió, ahora mi pelo es más fuerte y está mucho más bonito. Dedico el tiempo necesario a hidratarlo con mascarillas y no he vuelto a teñir ni a decolorar con productos agresivos, con esto ya noto un cambio brutal. No hacer tantas locuras ha sido la clave para dar el paso a este nuevo champú sólido. Después de usarlos varias veces y recoger info en redes sociales de consejos de uso y trucos, estoy en condiciones de hacer esta review sin miedo a equivocarme. ¡Vamos!
Un champú para cada tipo de pelo
Los champús en pastilla que hemos pedido a Lush son el seanik y el Soak and Float, aunque uno es para mí y el otro para Hecter, voy a probar qué tal funcionan los dos en mi pelo así puedo hacer la review de ambos.
Como os comentaba, mi pelo está castigado porque desde hace años quiero ser nórdica de cuello para arriba. Le he sometido a decoloraciones, con mayor o menor acierto dependiendo del profesional, a tirones para desenredar, champús de marca blanca y planchas a 1.000 grados. No me gustaba mi pelo y estaba en guerra con él hasta que me di cuenta que yo misma me lo estropeaba, así que hace un tiempito hice un parón, ahora estoy en modo mimos.
Champú sólido Seanik de Lush
Mis puntas, aunque están mucho mejor, siguen tirando a secas, las raíces tirando a grasas y el pelo fino. Con este cuadro clínico me decidí por el champú sólido Seanik que prometía en la web dar fuerza, brillo y volumen, justo lo que necesito. Este champú vegano se compone de sal marina, limón, gel de musgo de Irlanda y alga nori japonesa, hasta se puede ver en el propio champú. Además de estos ingredientes también tiene aceites esenciales de mimosa, jazmín y azahar, de ahí el olor tan increíble, como a colonia de bebé y flores, te transporta al verano.
Hace muchísima espuma y limpia muy bien, sí que es cierto que deja el pelo un poco seco y hay que echar acondicionador, sobre todo si como en mi caso ya lo tienes seco de serie. Después de poner el acondicionador y secarlo como siempre he notado muchísimo más volumen que con otros champús que he usado.
Champú sólido Soak and Float
Este está indicado para cuero cabelludo sensible, caspa, descamación y problemas de irritación. Tiene aceite de enebro para tratar estas problemáticas combinado con pétalos de rosa y caléndula para calmar el picor y el enrojecimiento. También incluye aceite de lavanda para equilibrar y por sus propiedades antibacterianas. Huele igual que las tiendas lush, de hecho nuestro baño ahora huele como una tienda simplemente dejándolo en la ducha.
En mi pelo ha ido también bien, sí que es cierto que noto menos volumen que con el seanik pero la sensación que me ha dejado es buena. No tengo descamación para probar si mejora el picor o la caspa así que de eso no puedo hablar. Sobre la sequedad, he tenido que usar acondicionador porque, igual que ocurre con el otro, la cantidad de sulfato que lleva acaba dejando el pelo demasiado seco.
¿Cómo aplicar el champú sólido? Consejos de uso que te van a venir bien
Antes de empezar a usar el champú sólido pregunté en Instagram consejos de uso y opiniones. La mayoría de la gente que me comentó coincidió en que hay que tener cuidado con almacenarlo mojado, pero no fue el único consejo, os dejo lo que yo hago y lo que me comentaron.
- Antes de la guardarlo en la caja debe estar seco, si se guarda mojado se pega al fondo y luego es prácticamente imposible de sacar porque la caja y el champú encajan al milímetro.
- Para secarlo usa una jabonera o un soporte de rejilla, es lo mejor. Nosotros tenemos una cesta de esas colgadas y ahí se seca genial.
- Corta el champú en trozos y usa solo un trozo cada vez, de esta manera no tienes todo al uso y como es un trozo pequeño puedes sacarlo de la caja sin problemas.
- No lo frotes contra el pelo- Es mejor mojar el pelo y las manos, frotarlo en las manos hasta sacar espuma y aplicar esa espuma en la raíz. El resto del pelo se lava con el champú que cae. Si lo frotas, además de que puedes partirte el pelo, la pastilla te durará mucho menos.
- Si quieres guardarlo en la caja sí o sí pero es muy nuevo, pon un papel film en la base para que no se pegue y que puedas sacarlo fácilmente.
- Si la caja que usas es la de Lush, ábrela antes de la ducha porque luego con las manos mojadas es super difícil.
- Si te vas a duchar pero no a lavarte el pelo intenta que no le caiga agua al champú sólido para que no se desgaste sin necesidad.
Según mi opinión y experiencia ¿Usar champú sólido sí o no?
Voy a empezar con la lista de pros y contras para exponer mis argumentos antes de dar una opinión final sobre el champú sólido, en concreto el de Lush pero hay cosas que aplican a champú en pastilla en general.
Inconvenientes de usar un champú sólido, de Lush y de otras marcas:
- Hay a gente que le parece un engorro tener que secar la pastilla, es cierto que este tipo de champús lleva muchos más cuidados que un bote líquido pero también tiene otras ventajas.
- Aunque los champús sólidos de Lush se venden como opción muy natural, sí es cierto que tienen algunos componentes que ellos llaman «sintéticos seguros» como es el sodium Lauryl, un sulfato conocido como tensioactivo que ayuda a limpiar y a hacer espuma. También algunos llevan perfume y colorante. Es verdad que quitando el lauryl, las proporciones son bajas respecto al resto de compuestos naturales.
- Que estos champús lleven sodium Lauryl sulfate (SSL) no es algo que me guste demasiado, aunque creo que sí que lo compraré más veces, no va a ser mi champú de cabecera o al menos lo usaré alternando con otros que sé que me van bien y son menos irritantes. Desde Lush sí que indican que en este tipo de champús sólidos la concentración que llega a nuestro pelo de SSL es muy baja comparado con un champú líquido. En este caso llega en forma de espuma mientras que en un champú líquido aplicamos prácticamente el producto en el cuero cabelludo. Que cada uno saque sus conclusiones.
- El champú sólido Seanik tiene las algas que se despegan y todo el rato pienso que las tengo pegadas en el pelo. Supongo que al aclarar se van, pero esa sensación es rara.
- Si vienes de champú de gran consumo de estos que compras en el supermercado puede que notes que tu pelo cambia y puede que no para bien. Dale tiempo y si ves que no mejora puede que no estés usando un champú bueno para tu pelo.
- El pelo se queda un poco seco así que hay que usar acondicionador casi siempre de medios a puntas. El acondicionador en pastillas de Lush el 90% de la gente me ha dicho que es bastante mierdis así que ni me planteo comprarlo.
- Pica en los ojos, al menos los dos que he probado. No me ha entrado mucho jabón pero con poquito ya molestaba bastante.
Ventajas para usar un champú sólido:
- No se generan residuos plásticos.
- Me parece cómodo para llevar en la maleta en los viajes o escapadas, no tienes que meterlo en la bolsita de los líquidos ni preocuparte por llevar suficiente cantidad para X días. También puede ser interesante para llevar al gimnasio, a la piscina o similar.
- Los olores de los champús de Lush no son de otro mundo, son de otro universo. Sobre todo el Soak and Float.
- Si lo usas bien dura mucho. Según Lush, un champú sólido equivale a 3 botellas de 200 ml de champú líquido. Nosotros estamos empezando a usarlo pero he hablado con gente que los tiene desde hace meses y están casi como el primer día.
- El precio de cada pastilla está entre 8 y 10 euros. Si dura tanto como dicen no me parece caro.
- Los champús de Lush son cruelty free y no testan con animales ni ellos ni sus proveedores.
- Hay muchísimos tipos en el mercado para diferentes tipos de pelo, problemática o preocupación.
Sí que recomiendo tener un champú sólido en casa, hay muchos en el mercado, no solo está Lush, y seguro que puedes encontrar el que funciona con tu pelo. En mi caso volveré a comprar cuando se me acabe, dentro de aproximadamente 80 lavados según dicen, pero no lo usaré como único champú; mi idea es alternarlo con otros que resequen menos. Así no acostumbro el pelo al mismo siempre. También me apetece tener uno para llevarlo a los viajes, es algo que me parece super cómodo.