Diseñar un Candy Bar: Dale un toque dulce a la boda
La opción de poner un candy bar en la boda no es algo nuevo, se está poniendo muy de moda para la hora del baile, que con las copas entran muy bien unas gominolas, pero… No todo vale. Tu boda no es un cumpleaños, así que cuida los detalles al máximo.
Vamos a ver qué debemos tener en cuenta a la hora de poner un Candy Bar y algunas ideas chulas que pueden servir de inspiración para las futuras novias. Pones un toque dulce es algo barato, que sorprende a muchos invitados y que dará que hablar.
Te dejo una serie de pasos que debes tener en cuenta si quieres poner un Candy Bar.
Los colores del Candy Bar
Los colores dentro de una boda es algo que se debe elegir antes de empezar a preparar nada, así conseguiremos dar una visión global y unificada del evento. Estos colores, por lo tanto, serán los predominantes en las invitaciones, centros de mesa, decoración de la ceremonia, etc… Y por lo tanto, en el candy bar. Apuesta por gominolas y decoración en esa línea. No es elegante llenar la mesa de gominolas como si de una tienda de chucherías se tratara. Un truco para que tampoco quede cargante es apostar por decoración y algunos dulces en los tonos de la boda y combinarlos con otros dulces con tonos más neutros como el blanco o tonalidades marrones.



¿Cuándo montar el candy bar en la boda?
El mejor momento para montarlo es después del baile de los novios, un poco después de que se inicie la barra libre. Deja pasar al menos 1-2 horas desde que se sirvió la tarta o tu candy bar no tendrá el éxito esperado. Generalmente, después de la tarta viene el ramo, los agradecimientos a los familiares, proyecciones de vídeo, el baile nupcial…. Y después la barra libre, así que no es difícil esperar ese tiempo.
Una vez haya empezado la barra libre y la gente empiece a bailar, seguro que necesitan reponer azúcares y se tiran de cabeza a por la barra libre de chuches.


¿Dónde colocarlo?
Como comentábamos en el punto anterior, lo más lógico es ponerlo en la pista de baile donde todo el mundo tenga acceso. No lo coloques en un lugar muy escondido o entre las mesas que quedan del comedor, porque dificultará el acceso y por lo tanto el éxito del candy bar. Lo mejor es una pared limpia para luego poder lucirte con la decoración y situarlo lejos del bullicio pero visible, así no molestará a nadie para bailar a sus anchas.


¿Qué poner en un candy bar?
Como es lógico, un candy bar lleva cosas dulces: Gominolas, muffins, galletas, palomitas de colores, bombones, piruletas, macarons… No te preocupes por qué poner, haz que todo sean cosas ricas y que llamen la atención. Un consejo: Pon siempre algo que sorprenda muchísimo, como por ejemplo, en la foto anterior, pulseras de esas de cuando éramos pequeños que tenían cuentas que se comían. 🙂


Decoración del candy bar
Debemos prestar atención a la decoración del Candy bar, además de llevar los colores de la boda, también es importante darle un toque diferente y único a la mesa. Para eso, es bueno apostar por carteles, banderolas, pizarras o letras de madera o de cartón. Por ejemplo, estas letras de cartón pueden quedar genial en una boda rústica, así, además de decorar, presentaremos la mesa a los invitados. Yo tengo unas letras de madera pequeñitas en la estanterías con las iniciales: A & H, las compré en un chino a 1,20 cada una, así que si podéis daros una vuelta por alguno, igual encontráis algunas letras de madera baratas para decorar la mesa, 😉
Los dulces podéis colocarlos en platos, jarrones de cristal o incluso en objetos un poco diferentes para sorprender a los invitados, como por ejemplo maceteros o vasitos de cartón ya preparados con las gominolas para que cada uno coja el suyo. Todo es ponerle un poco de imaginación 😀




Espero que este artículo os haya ayudado y dado unas cuantas ideas para montar vuestro candy bar. Recordad que no hay que gastar mucho dinero para tenerlo, podéis usar jarrones y decoración que tengáis por casa y un poco de creatividad y seguro que queda genial!